Entrevista con Francisco Román, primer ejecutivo de Vodafone España

Copio y pego una entrevista publicada en la edición digital del periódico económico Expansión. No tiene desperdicio.

Pregunta: Da la sensación de que en los últimos resultados de Vodafone se ha escogido a España como cabeza de turco para justificar una mala evolución.

Respuesta: No es así. Tenemos unos buenos resultados en el primer trimestre del año (abril-junio). Hemos facturado más de 12.500 millones de euros en todo el grupo, con un crecimiento, en euros del 19%. En términos orgánicos o comparables, el crecimiento es del 1%. Además, si buceas en los resultados, se ve que la estrategia del grupo se refrenda. Por ejemplo, se ve que la apuesta por los países emergentes es acertada.

Los ingresos en esos países crecen un 30% en conjunto y en India un 52%. Además, India añade 1,7 millones de clientes cada mes, cinco millones en el trimestre. La estrategia de crecer en el mercado 3G también se está cumpliendo. Tenemos casi 30 millones de clientes 3G en todo el mundo.

Ahora bien, en cuanto a Europa occidental, el crecimiento en libras es del 15,5% mientras que el orgánico supone un decrecimiento del 0,2%, porque estamos hablando de los mercados maduros. Con esta situación el grupo señala que se reafirma en sus previsiones de Beneficio y de cash flow y que de los ingresos se situará en la parte baja de la gama prevista.

P.: Entonces porque se menciona a España de forma tan llamativa

R.: Estamos satisfechos con la evolución. Hemos sumado 171.000 clientes nuevos de forma que ya hemos sobrepasado los 16,2 millones. Además, hay 546.000 nuevos clientes que son 3G, de forma que el 36% de la base total de clientes son ya 3G. Además, el tráfico de voz crece un 8,2%.

Lo que pasa es que los precios han bajado más y el aumento del tráfico no ha podido compensar la bajada de precios. Pero es que hay tres elementos que empujan la bajada de precios: uno son las decisiones regulatorias con la reducción de precios de terminación y del roaming internacional. También se ha producido una optimización del uso del teléfono, de forma que los clientes ajustan su uso más a los periodos en los que tienen más ventajas. Y por último nosotros hemos adelantado este año la campaña de verano, lo que ha hecho que el precio por minuto baje.

Lo que pasa es que cuando anuncias tus resultados la audiencia es la comunidad de analistas e inversores, que han descontado ya los datos recurrentes y se fijan, sobre todo, en los cambios de tendencias. Y España ha estado durante 18 trimestres seguidos creciendo más que las otras filiales europeas. Por eso cuando se ve que este trimestre los ingresos orgánicos han caído un 2,5%, pues es lo que a los analistas les interesa más, porque España es un país importante.

Dentro de las filiales de Vodafone, España siempre ha dado buenos resultados. Por eso cuando no ofrece datos tan buenos, eso constituye la noticia, y es lo que se comunica. Nosotros pusimos cierto énfasis en comunicar esa novedad y uno se puede preguntar si pusimos demasiado énfasis.

Pero lo que no se puede ocultar es que España tiene una trayectoria comercial sólida.

P.:¿Estamos llegando a niveles de saturación en España?

R.: Ha ocurrido en muchas operadoras en muchos países. España está alcanzado un nivel de maduración que ya hay en otros mercados, lo que supone que los crecimientos que hemos venido disfrutando ya no se podrán dar en el futuro.

P.: Parece que España pierde peso dentro de Vodafone

R.: España sigue siendo un país muy importante para Vodafone. Es un gran contribuidor de valor añadido. Por ejemplo, en España están las unidades centrales de diseño de radiofrecuencia para toda la multinacional, es decir, una de las actividades más estratégicas de un operador, porque supone diseñar como se construyen las redes y como se instalan las antenas. Esto es una prueba de que la telefonía móvil es portadora de valor y generadora de talento. La telefonía móvil es una ventaja competitiva para España.

P.: Pero atribuir al entorno macro la caída de ingresos tiene un problema de imagen si resulta que otros operadores, como Telefónica, presentan mejor evolución.

R.: A nosotros no nos competen juzgar la situación macroeconómica ni emitir análisis sobre ellas. Pero además, los movimientos trimestre a trimestre que comparan con años anteriores, tienen sus peculiaridades. Cuando los crecimientos son escasos, cruzar las fronteras es más fácil. Si tu trimestre hace un año fue intenso en crecimiento, la comparativa es peor.

En Vodafone España, además, el hecho de que hayamos anticipado la campaña de verano, al mes de mayo, ha hecho que seamos más agresivos en precios en el trimestre. Repito, el tráfico en minutos ha crecido un 8% pero los precios bajaron más y no se ha podido compensar los ingresos con el aumento del tráfico. Es cierto que las cuestiones macro nos afectan a todos, pero existen otros factores más específicos. Por ejemplo, el peso de la inmigración en nuestra cartera de clientes es alto y hemos visto una optimización del uso por parte de este tipo de clientes, con una bajada de las llamadas internacionales, por ejemplo.

En resumen, negar que el entorno macro tiene que ver, sería ridículo. Pero atribuirle toda la responsabilidad no tendría sentido.

P.: Y no hay también un impacto creciente de los nuevos entrantes como Yoigo o los operadores virtuales, con propuestas de tipo ‘low cost’?

R.: Los nuevos entrantes están captando clientes como no podía ser de otra manera, aunque dentro de esas empresas hay algunas con características diferentes como Euskaltel. Se ve que en los virtuales y Yoigo hay una fuerte concentración en clientes prepago, pero creo que si se comparan precios efectivos por minuto las diferencias son escasas. Creo que andamos con un precio medio de prepago de 14 céntimos minuto. Si a eso se le suma nuestra oferta de terminales y los programas de fidelización, nuestra oferta sale bien parada.

P.: Cuando llega un nuevo primer ejecutivo a una compañía siempre existe la tentación de ser más riguroso en sus primeras cuentas, para luego presentar mejoras que atribuir a la gestión. ¿En esa sobreactuación a la hora de comunicar los datos, no puede haber influido la llegada del nuevo primer ejecutivo, Vitorio Colao?.

R.: Somos tremendamente rigurosos al anunciar nuestros resultados. Lo que hemos hecho ha sido poner el acento en lo que suponía un cambio de tendencia, la evolución de España. Es cierto que coincide con la llegada del nuevo consejero delegado del grupo y por eso es posible que algunos puedan llegar a ver estos resultados como un balance o como un cambio de época, es inevitable.

P.: Dada la actual situación económica, ¿existe algún plan para recortar la plantilla del grupo en España?

R.: No veo porque habría que plantearse ningún recorte de plantilla. Insisto que si se miran los resultados en España se ve que son sólidos. La filial española está entre las mejores de Vodafone en muchos parámetros. Por ejemplo, en ingresos medios por cliente (Arpu).España está muy por encima de los principales mercados europeos, al igual que en la cartera de clientes de contrato: la de España es más alta que en otros países europeos con un 58,8% de la cartera (Reino Unido 40,8%, Italia 10,2% y Alemania 43,7%).